jueves, 24 de febrero de 2011

10... viaje



Una semana duramos adrian y yo en guanajuato, le enseñe todo lo que sabia de hay, visitamos cada museo y monumento, entramos a todas las minas que pudimos entrar, le conte cada historia leyenda y anecdota que pudiera contar, lo abrase la mayor parte de tiempo que pude hacerlo. 7 dias despues empesaba a olvidar porque aviamos ido hay.

- entonces a donde quieres ir? -adrian me miro tan comprensivo como siempre.

sabia que a el le encantaba donde estabamos, pero no puso resistencia cuando le dije que deviamos irnos.

- no lo se, pero aqui no voy a encontrar nada

acave de cerrar la maleta, ahora no solo con mis cosas sino con la nueva ropa que aviamos comprado.

adrian sonrrio y tomo la maleta, salio del hotel y dijo que me esperaria afuera, la verdad habia pasado mucho tiempo desde que me sentia tan feliz, no queria renunciar a eso, pero no dudaba que queria encontrar a sebastian. sali de la abitacion tambien.

sonrriendo de oreja a oreja cruze la calle donde adrian me estaba esperando, solo nesesite dos pisos en un elevador y un poco de aire fresco para mi nueva y loca idea, la verdad nisiquiera yo sabia que aria pero sabia como empezarla.

-ahora estoy convensido de que tienes un plan

tome la maleta y voltee a verlo.

-sabes correr?

-puedo intentarlo - sonrrio - que tienes en mente?

abri los dos broches de la maleta y la avente a la calle, se abrio en el aire y golpeo a un aunto haciendo que la ropa volara por todos lados, tome la mano de adrian y sali corriendo, solo escuche que el dueño bajaba del carro a gritarno, corri con mas fuerza asta que adrian se adelanto y fue el quien me jalaba a mi, corrimos asta llegar a una tienda, entramos hay a descansar y me apolle en la pared, voltee a verlo, yo apenas podia respirar y el parecia que apenas avia caminado unos pasos, respiro un poco y se paro frente a mi sonrriendo al igual que yo.

- que acavas de hacer?

me rei y cuando pude recuperar mi aliento tome de nuvo su mano y sali de la tienda, pare a un taxi que nos llevo al aereopuerto. En todo el camino mantuve mi actitud misteriosa (o mas bien, no sabia que explicacion dar), aunque no duraba mucho cuando adrian y yo nos veiamos volviamos a reir.

cuando llegamos tome el voleto al sigueinte vuelo dentro de mexico sin dejar que adrian viera los voletos y lo lleve a la puerta que nos tocaba para abordar el avion que apenas alcanzamos a hacerlo.

me sente en la ventana y adrian se sento a mi lado, no sabia nisiqueira que aria una ves que llegara, no es que me quedara muhco dinero pero aunque el avion era un gasto inesesario, ahora solo podia pensar en concentrarme y ver por la ventana como el avion despegaba, y despues como las nuves lo abrazaban como dandole la vienvenida al cielo, senti un pequeño cosquilleo en mi pecho, ahora que ago todo esto, el cielo tambien me dara la bienvenida?, sonrrei burlandome de mi, sabia perfectamente la respuesta.

despues de talves una hora de silencio y contemplar el cielo y añorar lo que nunca podria sentir recorde la razon de mi valentia y trankilidad y voltee a ver a mi acompañante.

el tambien estaba viendo por la ventana, ahora que lo pensaba si el era un angel, el devio de poder volar, lo contemple a el, no tenia razon, no sabia porque, solo encontre algo que buscaba, solo que esta ves al verlo no sentia esa felicidad de siempre, lo mire mejor, lo mire a los ojos, triztes buscando algo tambien.

levante mi mano izquierda y acaricie su mejilla derecha, el parpadeo y parecio que despertaba de un pensamiento profundo, me volteo a ver.

-porque estas aqui.

sonrrio como si estuviera jugando, pero mi cara no cambio.

-porque tu me trajiste.

nege despacio con la cabeza.

-no, porque estas aqui, en la tierra, sin tus alas.

la sonrrisa de adrian se borro y no estuve segura si estuvo bien esa pregunta, aun asi no me arrepenti, con su mano tomo la mia y la bajo junto con su mirada.

-para que quieres saber eso?

-porfavor.

-vine a cuidarte a ti

y perdiste tus alas por cuidar a una humana?

-si
sabia que notaba, su voz era cortante, y no me miraba, no sabia si insistir o solo dejarlo asi.

-porque no quieres decirme?

-ya te lo dije.

-pero se que estas mintiendo, todos tenemos un angel guardian y no les cortan las alas verdad?

sonrrio como si le divirtiera mi conclusion, yo sonrei solo de verlo.

-porque senti odio

-y eso es una razon?

-senti rencor, senti desprecio, queria venganza

vi como en los ojos de adrian se infiltraban sus recuerdos, obscuros, empesaron a recordarme los ojos de sedit, baje la mirada, como el podia sentir tanto odio por algo, o por alguien?

baje el tono de mi voz, no tenia miedo de el, jamas lo tendria, pero repelaba la idea de ver en sus ojos reflejados los de sedit.

-por que?

-porque podia ver como lastimaban a la persona que mas me importaba

no sabia como funcionada el cielo, y no le habia preguntado como trabajaban los angeles, talves los angeles no podia sentir, solo podian pensar y ser buenos, pero eso no tenia mucho sentido, si un humano ve que lastiman a su ser querido, lo mas normal es que quiera protegerlo.
su ser querido... la persona que mas le importaba, estaria refiriendose a una mujer?, talves a alguien que amaba?.

-entonces estabas enamorado.

abri los ojos como dos platos, estupida, porque avia dicho eso. no era algo que deviera saber, de echo era su vida no devia importarme, aunque como su amiga talves podria ayudarle, "se realista tu no quieres que se valla con nadie mas", diablos esa voz en mi cabeza de nuevo, pero claro que esta ves no tenia razon, "que no la tengo?, tu lo que quieres es quedarte con el angel, porque sabes que sebastian no aparecera.

-algo asi.

no sabia que sentir, adrian callo la molesta voz de mi cabeza pero... ahora senti algo extraño cuando pronuncio esas palabras, tal ves?, entonces avia una posibilidad?.

-... y, estas enamorado aun?

el sonrrio, yo lo respondi con una sonrrisa que dizfrasaba mi miedo hacia esa respuesta, si decia que si, me tendria que alegrar por el no?, entonces porque no sentia alegria hacia tal respuesta, y si decia que no entonces no tendria porque sentirme contenta, sin embargo de solo pensarlo me dava alivio.

-algo asi.

sonrei, porque pensaba tantas cosas confusas?, el estabuvo hay cuando yo nesesite ayuda, sigue aqui a mi lado, no puedo confundir el amor con una amistad, el es solo un amigo, el es solo mi hermano.

de pronto el altavoz del avion interrumpio mis ideas, al fin la azafata nos hablaba para decirnos que aviamos llegado a nuestro nuevo destino, chiapas.

martes, 22 de febrero de 2011

9...Sedit.


-Conosi a sedit en un cafe, el entro y no pude evitar voltear a verlo, era alto, bronceado, con el cabello castaño obscuro, sus razgos eran fuertes, sus pestañas largas y sus ojos claro, parecia un actor de cine y no solo guapo, cuando entro pense que era el hombre mas sexy que jamas avia visto, podia decir que tenia 26 años, aun asi, la edad no podia distinguirsele, iva vestido completamente de negro, pantalones, zapatos, playera y una chaqueta de cuero, todo del mismo color. yo estaba sola, habia ido a leer un rato pero cuando lo vi nisiquiera pude disimular, el volteo a verme, sonrrio - ise una pequeña pausa recordandolo, todo en mi cabeza era perfectamente claro, los grandes ventanales de la cafeteria, el sillon cafe tan comodo donde me avia acomodado, la pequeña y redonde mesa frente a mi con el capuchino que estaba tomando, la tentacion y el deseo inexplicables al verlo, todo - se hacerco a mi, todas las mujeres lo volteavan a ver, despues a mi, no podian creer que fuera conmigo, yo no podia creer que lo isiera, se sento en el sofa frente a mi, no sabia que decir, parecia una adolescente frente al chico que le gusta, el lo noto, a el le gustaba tenerme asi.

*yo recorde a sebastian, el era el unico que amaba, asi que hable con el evitando verlo directamente para no parecer una estupida enamorada, me rei vastante, parecia agradable, sin pensalo aviamos quedado de vernos al dia siguiente hay mismo, y despues de una semana me invito a cenar a un respaurante vastante caro, yo nunca supe como negarme, la verdad no queria hacerlo, pero cada ves que hablabamos olvidaba a sebastian y me hacia pensar lo mala persona que era. esa noche que quedamos no me presente, me quede en el hotel donde sebastian y yo nos ospedabamos, pense que seria mejor asi, eran vacaciones en la universidad y sebastian me habia regalado un viaje con el a barcelona, cuando pensaba en eso me sentia mal conmigo misma, como si lo estuviera engañando.*

*al dia siguiente sedit estaba esperandome en la puerta del hotel, sebastian se habia ido a trabajar en unas investigacion y cuando lo vi mirandome desde fuera no supe que hacer, pense en retroceder y devolverme al cuarto, pero cuando trate de caminar me senti pesada y no pude moverme, el camino lentamente hacia mi, parecia que media cada segundo que utilisaba, respiro pausada y profundamente, me dijo que olia exelente, esquisita, por primera ves tenia miado, pensaba que era la persona mas amable, la persona mas sincera y linda, pero despues vi sus ojos y los que antes eran celeste, ahora eran negros, violentos, pense que veia los ojos de la muerte, tuve panico, me desmalle y cuadno desperte estaba en mi cuarto y el estaba a mi lado - tome las manos de adrian con mas fuerza - sedit acaricio mi rostro, senti como si la lujuria me estuviera acariciando, todo lo que pedia en ese momento era tenerlo, pero recorde que esa noche sebastian y yo aviamos estado juntos en esa cama, no podia estar con sedit por deseo, amaba a un hombre y se lo dije y el dijo que entendia, despues no volvi a verlo, regese con sebastian a guanajuato y aunque no logre olvidarlo no podia estar mas feliz con quien estaba, despues de dias volvi a encontrarme con sedit, me acompañaba cuando sebastian se iva, se aparecia para consolarme cuando empesaron los problemas de sebastian, y cuando sebastian y yo nos separamos el estuvo conmigo, me dijo que no tenia porque estar sola - cerre los ojos, hay estaban las imagenes, en mi mente, el delante de mi, describiendo mi dolor como si el lo uviera creado, luego sus manos sobre mi, sus labios en mi cuello, el calor de su cuerpo junto a mi, un ligero cosquilleo jugueteo entre mi cuello y paso por mi pecho y mi abdomen asta acavar en mi entrepierna, abri los ojos apenada, adrian lo avia notado, cerre mas mis piernas y solte sus manos - tu sabes que paso luego.

-tu te negaste a estar con el, buscaste a sebastian, eres fuerte.

lo mire burlona a su comentario, , estaria jugando.

-deje que me tocara, que me manipulara, eso no es ser valiente.

adrian se hacerco y acaricio mi mejilla, senti un hormigeo familiar y calido, agradable, se hacerco lo sufisiente a mi oido como para sentir su respiracion y susurro.

-el demonio te a tentado natalia, y tu lo as ignorado, eres fuerte.

me separe un poco y lo vi a los ojos, sabia que avia llorado mas que cualquier niña pequeña, pero no me importaba esta ves estaba feliz de tenerlo a el, me avalanse hacia el y lo abrase como si me dijera que ya no volveria a verlo de nuevo, y asi junto a el de nuevo pude dormir.

miércoles, 16 de febrero de 2011

8... estoy a tu lado.


Desperte poco a poco los ojos, me ardian, no habia luz, todo estaba obscuro, trate de mover mi braso pero apenas podia sentirlo, algo me estaba sujetando, estaba atrapada?
respire profundamente, mis ataduras se movieron conmigo, no estaba atada, revise que sentia, que olia, mi mano derecha, estaba siendo sujetada por alguien.
-adrian
susurre reconfortada, el se movio y volteo a verme.
-despertaste
sonrrio y como un niño ante su primer cachorro trato de abrasarme, pero cuando trato de soltar mi mano para hacerlo lo detuve, su mano era lo que me alludaba a sentir que seguia viva, a sentir, el lo entendio y sonrrio.
-fue un sueño
dije con voz rasposa, lo fue?, no queria asustarlo, seguro el no sabia de lo que hablaba, pero estaba abrasandome, talves si lo sabia, trate de verlo a los ojos, calidos sonrei de nuevo al verlos.
-perdon por no despertarte antes - en verdad parecia estar decepcionado de no averlo echo - si uviera sabido que sedit te encontraria...
-sedit - lo interrumpi sin dejar de verlo a los ojos, el los evadio - como sabes de sedit?
adrian volteo su cara para no encontrar mi mirada y solto mi mano, estaba apunto de levantarse pero antes de que lo isisera comense a hablar.
-se sincero conmigo, porfavor.
me acomode, y sentada me recarge en la comoda de la cama, el se sento frente a mi y tomo mis manos, era una sensacion extraña, como si solo asi supiera que todavia me quedan cosas que vivir.
-se lo que tengo que saber de el, no quiero que el te aga daño
no era una respuesta para mi, pero no estaba segura de querer saber la verdad. baje mi mirada a encontrar nuestras manos entrelasadas, las mire por un largo tiempo, no queria que me soltara. cerre los ojos y respire profundo, ahora estaba calmada, con el frente a mi, aun en el cuarto obscuro sabia que no era un sueño, una pesadilla.
-era de sedit de quien corria la noche que entre a la casa de sebastian, pero eso ya lo sabias - - sedit me dijo que yo estaba sola, que sebastian se habia ido porque ya no me amaba, porque nunca me amo, dijo que solo me utilisaba, pero no podia creerle, sebastian me demostraba lo importante que era para el, antes de lo de mariana, el y yo no tuvimos problemas, pero luego me convencio, y si el en verdad me estaba usando?, yo era menor, el tenia cosas mas importantes. y sentia que realmente estaba sola. sedit, sabia todo sobre mi, sabia perfectamente como herirme.
por primera ves, estaba hablando de sebastian, de algo que me dolia sin que mis ojos formaran un mar de lagrimas, aunque mi alma seguia en pequeños pedasos, sentia que las manos de adrian los mantenian juntos evitando que se esparcieran y quedara en ruinas.
el silencio me dio alvio, el espero que siguiera, yo espere que pudiera hacerlo.
levante la vista, nesesitaba fuersas para poder contarle a adrian todo sobre sedit, busque sus ojos, los encontre, el parecia todo lo que nesesitaba para seguir.
-se que sabes quien es el.
el afirmo sin decir nada.
-pero aun asi tu nesesitas decir todo lo que sabes.
su cara no tenia expresion, aun asi sabia que tenia razon, nesesitaba contarle quien era, no por el, por mi. dude un largo rato hasta que interrumpio el silecio.
-estoy a tu lado - sostuvo mis manos con mas fuerza.
era todo lo que nesesitaba.

miércoles, 9 de febrero de 2011

7... sueño.


Estaba todo obscuro, no podia ver nada, y regreso esa sensacion de soledad, porque no simplemente se iva?

-no se ira - una voz sono, parecia tan conosida aunque juraria nunca averla escuchado, venia desde lo mas profundo de la obscuridad - yo tampoco me ire, me extrañaste?

voltee asustada a donde creia aver escuchado la voz, senti a alguien pasar detras de mi, voltee, poruqe no podia ver nada?.

-estas asustada?

quien era?, cerre los ojos, esto devia ser un sueño, si un sueño, talves no pude aver echo algo mas imfantil pero trate de pelliscarme, no funciono, como despiertas d sueño?, escuche a la voz reir, se estaba burlando de mi?.

-segura que no me recuerdas?

sedit, mis ojos se abrieron como dos platos, no, no, no, esto no podia estar pasando.

-veo que ya me recordaste.

senti su sonrisa frente a mi y su cara salio de las tinieblas como si el fuera creado por ellas, no vi mas que sus ojos, negros, llenos de sangre, sedientos de lujuria, no avia mas que odio y rencor, como la ultima ves que los vi, imponiendo miedo, como si le facinara, como si viviera de eso, se alimentara de eso. baje la mirada, no podia enfrentarme a Sedit.

-me dejaste abandonado, preferiste ir a dormirte a una casa abandonada - empeso a caminar alrededor mio, como si estuviera asechando - no es algo dramatico hasta para ti? - si dedo resbalo por mi cuello, sus manos eran suaves, pero aun asi no se sentian bien - aun no puedo creer que te fueras, quiero decir, pocas lo an echo y tu solo me dejaste - sonrrio, estaba jugando? - bueno, bueno, bueno, ya no hay nada que hacer al respecto, no podemos devolver el tiempo, no ya no puedo hacer eso.

Sedit se puso de nuevo frente a mi, porque este sueño era tan largo?, ya queria despertarme.

- no no no no no, mi niña, te quieres ir ya tan rapido?, pero si e venido solo a visitarte, aunque no te lo mereces despues de lo que isiste, creo que me deves una explicacion.

-no te devo nada - mi voz era decidida, pero mi mirada aun estaba perdida, no podia verlo a la cara.

- yo te prometi que mientras estuvieras conmigo no estarias sola - de nuevo su mano acaricio mi cuelloy despues acomodo mi cabello tras mi oido. - yo te iva a dar todo lo que quisieras, no nesesitabas nada mas.

levante la cara y entrente su mirada.

- no puedes prometer que no estare sola, tu eres la soledad, no me puedes dar nada, no sabes lo que nesesito, pero se que no te necesito a ti.

trate de pegarle, estaba enojada, pero mi mano solo lo atraveso como si fuera de aire.

-no querida eso estuvo muy mal.

sedit tomo mis muñecas con sus manos y despues me hacerco a el, no podia soltarme, no podia moverme o correr por mas que tratara.

-quieres estar sola, eso es lo que quieres?, bien pues eso tendras, vendras suplicandome que desaparesca ese sentimeinto, suplicaras que no me aleje.

su cara cambio, era la de sebastian, cerre los ojos, eso no podia ser, el rio satisfecho mientras sentia mi cuerpo partirse en pedazos, me solto y se dio la vuelta caminando de nuevo a la obscuridad, como quien vuelve a su hogar y le resiven con gusto. pero en cuanto desaparecio la obscuridad me empujo al suelo, quise irme, porque no despertaba?, comenso a rasparme y a golpearme sentia algo, no sabia que pero me hacia axficciarme, no podia respirar, y no me dejaba moverme, eran como sombras sobre mi, pero no era solo eso, me lastimaban pero parecian transpasarme y golpear mi alma, estaba desesperada, estaba llorando, trataba de gritar pero no escuchaba nada, no podia escapar, porque esta pesadilla no teriminaba, no queria esto, trate de patear, mis ojos parecian mares y lloraba como jamas, pero no me oian, porque naide me oia?, de neuvo estaba sola?. llore, roge suplique, pero nada funcionaba, solo queria despertar.

-natalia despierta!

adrian?, quise llorar de felicidad, era la voz de adrian, si estaba dormida, pero como se puede despertar, trate de gritarle para que me alludara, o en este momento que me matara ya no me importaba.

-porfavor natalia, despierta!!!

sonaba desesperado, talves ya era demaciado tarde, ya no dolia tanto, tenia sueño, la sombras siguieron atacandome, pero ya estaba dormida.

sábado, 5 de febrero de 2011

6... guanajuato


llegamos a las 3 de la tarde, fuimos los ultimos en bajar de las pocas personas que
nos acompañaban, adrian tomo mi maleta y caminamos para registrarnos en uno de los hoteles mas cercanos, dejamos nuestras cosas en la abitacion y enseguida me deje caer de espaldas en una de las dos camas que avia, adrian se sento en la de enfrente.

-segura que fue buena idea venir?

no no estaba segura, pero no me veria mas insegura de lo que ya parecia, entonces solo segui mirando el techo.

adrian se levanto y enseguida lo vi incado sobre mi y antes de poder quitarlo sus dos manos esposaron las mias contra la cama, me quede viendolo sin saber que decir o como actuar.

-dije, segura que fue buena idea venir? - sonrrio de una folma malvada y encantadora lo cual me saco una sonrrisa.

- estoy segura - dije tratando de creerlo.

adrian sonrrio, pero no se aparto de ensima, me quede viendo sus ojos largo rato, hermosos, no lo avia notado pero eran de color negro, profundos, dulces , fuertez, tristes. aparto su mirada antes de que siguiera viendolo y se sento a un lado de mi.

-entonces a donde queires ir?

-no estoy segura - me sente a su lado y mire a la nada pensando en que hacer - que tal si primero te enseño guanajuato?

mi sonrrisa traviesa delato mis intenciones de divercion y puedo pensar que fue lo que convencion a el de aceptar.

los dos salimos del hotel, caminamos por todas partes, recorrimos cada jardin, cada plaza, cada calle y varios de los callejones que conosia, entonces llegamos a uno de sus jardines, camine con el asta un pequeño kiosco en medio de el.

-este es el jardin union, desde la epoca colonial y fue el primero que tuvo iluminacion electrica, aqui fue donde sebastian y yo nos conosimos - en mi mente comenzaron aparecer las imagenes de aquel dia, y mis ojos proyectaron imagenes fantasmas de como estaba arreglado en ese tiempo, todos vestidos tan divertido, con enormes vestidos y ajustados trajes, sonrrei al ver todo aquello - mariana estaba sentada hay -señale una de las bancas junto al kiosco - con un caballero, y yo estaba caminando aburrida por aqui, entonces lo vi, el me estaba viendo, se hacerco y me pidio bailar, havia musica, havia parejas, no entendia porque decirle que no, comensamos a bailar dentro del kiosco con otras 4 parejas mas, pero para mi era como estar solos - voltee a ver donde recordaba aver bailado con el y lo vi haciendolo conmigo, mi mente recordo la musica, inolvidable, entonces adrian tomo mi mano haceindome recordar que ya no estaba en ese momento, voltee a verlo y sonrei - pero ya te lo platique, aqui encontrare muchos recuerdos.

- estare aqui para escucharlos.

seguimos platicando, y caminando por las calles, llegamos a la universidad, inmensa, con multiples escalones en la entrada como recordaba, parecia com si nunca uviera dejado, sentia que ya era tarde que tenia que correr, pero la verdad era que ya no tenia porque entrar, me pare frente al primer escalon y baje la mirada, trate con todas mis fuerzas de no llorar *no seas devil* me retepi, *afronta las consecuencias de tus actos*, de nuevo adrian tomo mi mano y pude controlarme, busque sus ojos y me trajeron consolacion, sabia que el me apollaba.

- gracias

- no hay por que

sonrrio y seguimos caminando, me tomo tiempo recuperarme, y camine en silencio junto a el, pero parecio entenderme, no me pregunto nada y nunca me solto de la mano, no dejo que me undiera, despues pude componerme, y adrian noto que estaba mejor, no tomo el tema, solo sigui como si nada uviera pasado.

- el callejon del beso - nombro - me imagino que este tambien tendra leyenda verdad?

volteo a verme sonrriendo y devolvi su sonrrisa.

- si la hay.

camine dentro del callejon y me sente en uno de sus escalones, espere a que el lo isiera y vi como parecia esperar cada palabra que fuera a decir, comenze.

- hay 68 centimetros de ancho en este callejon, y existen dos balcones que no estan tan separados, en uno de ellos vivia doña ana, que era cortejada por un joven llamado don carlos, pero su padre no tomo vien, la encerro y amenaso con mandarla a españa y casarla con un rico que alludaria su fortuna, su dama de compañia trato de alludar a su querida señora, hablo con don carlos y ambos trataron de encontrar la manera de que ellos dos volvieran a verse, encontraron que la ventana de la avitacion de ana daba a este callejon, tan angosto como para con una mano alcansar a tocar la pared de enfrente. don carlos investigo quien era el propietario de la casa de enfrente y la compro al precio que el diera aquella propiedad, carlos y ana se vieron por sus balcones una noche, pero el padre de ana los descubrio y aunque la dama de doña ana trate que el padre no entrara el con una daga en la mano entro y la clavo en el pecho de su hija, don carlos tenia la mano de ana aun entre las sullas y mientras esta se iva quedando fria y sin vida don carlos le dio un ultimo beso, y cuentan que la pareja que venga aqui tienen que besarse, o tendran 7 años de mala suerte.

sonrrei al ver la cara de adrian como un pequeño niño de 4 años a quien su madre cuenta una historia de aventura.

-entonces puedo darte un beso para la buena fortuna?

-no, eso es solo para las parejas

me rei y me levante del suelo, jamas avia venido a este lugar con sebastian, no era algo que considerara importante, creo que asta este momento sentia sin importarme pero de alguna forma adrian me asia emocionarme por ese lugar.

cuando vi a adrian levantarse y seguirme note un pequeño puchero en su boca y me hiso sonreir, me hacerque a el y bese su mejilla.

-para la buena suerte.

el sonrrio y me abraso, seguimos caminando le conte las leyendas que sabia de algunos lugares, aun cuando obscurecio admiramos las calles y nos contamos sueños e inventamos historias al pasar por lugares, todo me trajo un recuerdo, pero con el no me golpeo tan fuerte como para derribarme, algunos nisiquiera pude sentirlos, lo cual me iso sentir bien.

en la madrugada adrian y yo regresamos al hotel, saque mi pijama y entre al baño, me bañe y al salir me comense a vestir lentamente, sin alguna prisa, como si sintiera la paz, como si fuera algo parecido a la paz. sali y adrian estaba sentado en la cama con la pijama que aviamos comprado para el en una tienda, sonrrei y me sente frente a el en la que era mi cama, me meti entre las cobijas y lo voltee a ver.

- buenas noches adrian, gracias por este dia.

- tu fuiste quien me enseño todo

- tu fuiste quien me dio ojos para verlo todo.

sonrei y deje caer mi cabeza sobre la almhoada con los ojos cerrados, no tuve problemas para dormir.